Scott y su novio chateaban desde sus teléfonos, buscando a un chulazo para montárselo los tres. De tanto buscar acabaron encontrando a un súper chulazo macho y peludo con un rabako a prueba de culos tragones. El noviecito de Scott acabo con el culo bien reventado y lleno a sako de unas buenas dosis de lefa... Pero ya se sabe cuanto más te gusta... Más quieres