Jesus rulaba sin rumbo fijo al borde de la playa cuando al llegar a un parking se cruzo con Bruno, un tio bueno caliente a tope, que se estaba sobando el paquete, despues de unas miradas, los dos tios buenos salieron del parking y se fueron un poco mas lejos para pegarse unas buenas mamadas y darse por el culo bien a fondo, antes de correrse unas buenas dosis de lefa cada uno en la boca y el culo del otro... dificil de olvidar este intercambio de corridas...